Cada 23 de agosto, celebramos el Día del Internauta, una fecha que nos invita a reflexionar sobre una de las herramientas más transformadoras de la historia humana: la World Wide Web. Veamos este día no sólo como una efeméride, sino como una oportunidad para analizar el profundo impacto que ha tenido la red en nuestra sociedad y para recordar el hito que le dio origen.
La elección de esta fecha no es casual. Se conmemora el día de 1991 en que Tim Berners-Lee, un científico de la computación en el CERN, creó la primera página web. Aquel modesto inicio, concebido originalmente como un sistema para compartir información entre científicos, desató una revolución sin precedentes. Lo que comenzó como un proyecto en un laboratorio de física en Suiza, se convirtió en el cimiento de la sociedad digital global en la que hoy vivimos.
Desde una perspectiva técnica, la evolución ha sido asombrosa. Pasamos de las lentas conexiones por módem y las páginas de texto estáticas a un universo de alta velocidad, contenido interactivo, inteligencia artificial y computación en la nube. La ley de Moore, que predijo el crecimiento exponencial de la capacidad de los transistores, parece haberse quedado corta para describir la vertiginosa expansión del mundo digital. Hoy, llevamos en nuestros bolsillos dispositivos con una capacidad de cómputo superior a la de las supercomputadoras que llevaron al hombre a la Luna.
Sin embargo, el verdadero alcance del Día del Internauta se comprende al analizar su impacto social. Internet ha democratizado el acceso a la información de una manera que ni la invención de la imprenta pudo soñar. Ha redefinido industrias enteras, desde el comercio y el entretenimiento hasta la educación y la política. Nos ha permitido conectar con personas en cualquier rincón del planeta, fomentando la colaboración y el intercambio cultural a una escala nunca antes vista.
En el ámbito educativo, la red se ha convertido en una herramienta indispensable. Plataformas de aprendizaje en línea, bibliotecas digitales y recursos educativos abiertos han puesto el conocimiento al alcance de millones de personas, rompiendo barreras geográficas y económicas. Somos testigos a diario de cómo estas herramientas potencian la curiosidad y facilitan un aprendizaje más autónomo y personalizado.
No obstante, esta celebración también debe ser un momento de reflexión crítica. La ubicuidad de internet ha traído consigo nuevos desafíos: la desinformación, la brecha digital, las amenazas a la ciberseguridad y la privacidad, y el impacto de las redes sociales en la salud mental. Ser un «internauta» en el siglo XXI no solo implica saber navegar por la web, sino también desarrollar un pensamiento crítico para discernir la información veraz, proteger nuestra identidad digital y promover un entorno en línea respetuoso y constructivo.
Fuentes:
https://biblioteca.fadu.uba.ar/tiki-read_article.php?articleId=1637
https://www.lanacion.com.ar/tecnologia/por-que-se-celebra-hoy-el-dia-del-internauta-nid23082024/
https://www.eldiarioar.com/sociedad/dia-internauta-celebra-23-agosto_1_11604097.html
https://www.marketingdirecto.com/actualidad/infografias/15-hitos-en-la-historia-de-internet
https://www.pandasecurity.com/es/mediacenter/10-hitos-en-la-historia-de-internet/
https://es.wikipedia.org/wiki/Historia_de_Internet
https://www.delinternet.com/blog/el-impacto-del-internet-en-la-sociedad-nuestra-vida-diaria
https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/8914181.pdf
https://altarank.net/blog/influencia-del-internet-en-la-sociedad
https://nic.ar/es/enterate/novedades/que-es-el-dia-de-internet